martes, 15 de noviembre de 2011

Premio Hada Madrina

Este premio viene de la mano de mi tocaya Carmen, de La Artesanía de Artaste, una nueva amiga con la que puedo contar, y me hace mucha ilusión porque me ha parecido precioso, sobre todo por el texto con el que viene acompañado. Muchas gracias Carmen, y muchos besos.



La vida está llena de Hadas Madrinas, algunas saben a azúcar , otras a sorpresa y algunas, pocas, son amargas. En el mundo de las días mejores y peores. Pero siempre hay ráfagas de aire, movimiento y prodigiosos saltos. Mi Hada Madrina es alegre, sonriente y deliciosa, danzando todo el día con una energía que parece inagotable. Todo el mundo está de acuerdo en que tienen un maravilloso carácter: amabilidad en su justa medida, buen humor a raudales, ánimos infinitos. Cuándo mi Hada Madrina sonríe , el mundo se vuelve verano aunque allá fuera sople el viento frío. De la misma manera, en el momento en que mi Hada Madrina suelta una carcajada, se abre la puerta de la primavera , se montan terrazas, se llenan piscinas y las mañanas, mis mañanas se convierten en reinos de sol. Mi hada Madrina derrocha movimiento y chispea a cada instante En cada uno de sus actos, ella emite un picor alegre que provoca lagrimas de alegría y risas incontroladas. Los consejos que me da, no se pueden explicar, tal vez tan solo comparar. Por ejemplo sus enseñanzas huelen a menta por las mañanas, a regaliz cuando tienen catarro, a limón cuando se bañan con espuma y a rosas cuando me observa con sus ojos sin perder la atención.
Quisiera que mi Hada Madrina, no derramara ni una sola lágrima, pero en caso de que esas lágrimas deseen escaparse de los ojos serán, en realidad, gotas de mar por el que tanto le gusta correr. Debemos recogerlas con suma suavidad, como si fuera el adiós de un violín y tranquilamente mirar al frente. Si aún así hay más lágrimas, llenaremos frascos con ellas y las dejaremos evaporarse al sol del medio día, para que por la noche se conviertan en estrellas que alumbren el camino a las necesitadas, como era yo. Solo me queda dar las gracias a mi hada Madrina por caminar conmigo estas semanas, 
ya que el camino ha sido mucho mas llevadero y cuando me he caído, ahí estaba ella para enseñarme lo bonita que era la piedra que yo no había visto y me había hecho caer. Gracias Hada Madrina por todo lo que a tu lado he podido, y podré aprender.

5 comentarios:

  1. Es la puritita verdad, has sido mi tabla de auxilio en mis todavía comienzos.
    Muchas gracias.

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  2. Es un relato fascinante!! Envidio a quien lo escribió, por lo bien que ha sabido expresarse.
    Y también envidio a quien tiene esa hada madrina a todas horas a su lado, es como un ángel de la guarda.
    Y la que más envidia me da es la que lo ha recibido...de mayor, yo quiero ser así.
    Besos linda.

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  3. Muchas verdad y unos pensamientos preciosos, Ojala hubiera una hadita mágica en cada ser que se nos cruza en el camino.

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  4. ....que regalo más original !!!... que relato más divino !!!! me encantaaaaaaaaaaaaaa !!!!....

    felicidades por ello !!!

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